viernes, 14 de octubre de 2011

La Sentencia, Cádiz


Venerable Cofradia de Penitencia de Nuestro Padre Jesús de la Sentencia y María Santísima del Buen Fin.

Cádiz



datos historicos:


El 9 de abril de 1939 se crea la Comisión Pro-Cultos por un grupo de estudiantes que deseaban dar culto a un Cristo Cautivo que primitivamente se encontraba en el desaparecido convento de las RR.MM. Agustinas Recoletas, situado en la actual plaza de Candelaria.

La aprobación canónica de la Cofradía data de 1940 (8 de abril).

Realiza su primera salida procesional en 1940 desde la Iglesia castrense del Santo Ángel, en un paso "prestado" y portado por hermanos cirineos.

Es eregida canónicamente el 11 de mayo de 1946 por decreto del entonces obispo Tomás Gutiérrez del Valle, estableciéndose su sede en la Iglesia de la Merced, aunque durante tres años se trasladó provisionalmente, al clausurarse el convento de  Candelaria y estar en obras la Merced, a la Iglesia del Rosario.

En 1951, una vez reconstruida la Iglesia de la Merced, se traslada por Decreto Episcopal a dicha parroquia, en la que actualmente permanece.

La Virgen del Buen Fin procesionó por primera vez en 1950.





Imágenes:

El Señor de la Sentencia es de estatura mediana, levemente inclinado hacia delante pero manteniendo la cabeza erguida, ovalada faz, pómulos pronunciados, barba recortada partida en dos, las cejas son casi rectas y lleva un pelo natural pese a tenerlo tallado. El rostro, manos y pies están tallado en madera de cedro. Puede tratarse de la imagen procesional más antigua que se conserva en Cádiz, fechándose en la transición del gótico al renacimiento del siglo XVI, de autor anónimo. Fue restaurado por Juan Manuel Miñarro López en 1994, quien le realiza nuevo candelero.
Conforman el misterio las tallas de Pilatos (sentado en su trono imperial), Claudia Prócula, un esclavo negro que le ofrece el aguamanil, el lector y un romano, obras de Francisco Buiza hacia 1961, que sustituye a otras imágenes de Láinez Capote. Estas imágenes han sido restauradas por Arturo Torres Vivas (1998-1999), perdiendo su policromía inicial, que recupera el imaginero portuense Ángel Pantoja; a su vez, Torres Vivas talla la imagen de un nuevo romano que completa el misterio en 1999.

María Santísima del Buen Fin es obra del imaginero gaditano Miguel Láinez Capote, en 1950. Ha sido restaurada por Juan Manuel Miñarro en 1997, quien le hace nuevo candelero.

PasoS procesionalES:


El paso de Jesús de la Sentencia es de estilo barroco de grandes dimensiones, presenta bombo en el canasto y respiraderos dorados. Se ilumina con cuatro candelabros de guardabrisas de siete brazos en las esquinas y dos de tres brazos en el centro. Fue tallado en los talleres de Pérez Calvo en Sevilla, en 1961. Se procede al nuevo dorado por el artista gaditano Antonio Vargas Pacheco, quien realizó la delantera y trasera, realizando los laterales el sevillano Miguel Santana.



El de la Virgen es obra de Jesús Domínguez, de Sevilla, que se estrena en 1962, está compuesto por respiraderos en orfebrería plateada y dorada (el delantero presenta una capilla donde se muestra la aparición de la Virgen de la Merced a San Pedro Nolasco y Jaime I), los varales (dorados y policromados en sus basamentos, dos candelabros de cola de nueve brazos cada uno y candelería de noventa piezas; posteriormente se añaden ánforas de los Talleres Marmolejo en 1970 y la peana (1942) de estos mismos talleres en 1998, que provenía de la Hermandad de la Carretería de Sevilla, restaurada en los talleres de Luis Lerdo de Tejada. El palio se estrena en su primera fase en 2001 concluidas las bambalinas en 2006, diseñado por David Calleja y bordado por Juana Calleja; viene a sustituir al anterior bordado por las Hijas de la Caridad del Colegio de San Salvador de Jerez (1962).

Hábito Procesional:


Los penitentes visten túnicas en crema, con fajín rojo, capa negra y antifaces morados en las secciones de Cristo y rojos en las de Virgen.


estación de penitencia: miercoles santo

Su Templo: Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Merced


Perteneció al antiguo convento mercedario, fundado en 1629
 por los duques de Medina Sidonia. Tras sucesivas destrucciones sólo se conservan del conjunto original, la torre y la portada, obras de formas manieristas realizadas en laprimera mitad del siglo XVII.


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